Arroz blanco
Veremos ahora una sencilla forma de preparar un arroz blanco para que nos quede lo mejor posible, sobre todo sin que se pase transformandose en una enorme masa blanca (cosa que me sucedió muchas veces hasta que descubri esta forma de prepararlo)
Este arros, preparado de esta forma nos servirá luego para preparar algunos platos muy sabrosos, como un arroz con verduras, o agregandole alguna salsa de tomate, o una exquisita ensalada de arroz o simplemente como acompañamiento para algun plato de carnes.
Pero a lo que ibamos, el arroz blanco.
Pondremos en una cacerola una cantidad determinada de arroz (es importante medirla), pueden ser 4 tacitas de café, tazas de té, vasos pequeños, o lo que tengas a mano en casa, yo utilizo un pote de yogurt de cristal.
Entonces pondremos, por ejemplo, 4 potes de arroz en una cacerola, y ahora una de las partes mas importante, utilizando la misma medida pondremos una parte y un curato (x 1.25) o una parte y media (x 1.5) de agua por cada parte de arroz, o sea en nuestro caso 5 ó 6 potes de agua.(dependiendo si lo queremos mas durito o mas hecho)
Agregamos una pizca de sal y 2 cucharaditas de mantequilla.
Tapamos la cacerola y la ponemos a fuego máximo hasta que comience a hervir, en este momento bajamos la intensidad del fuego al mínimo y con la ayuda de una cuchara de madera removemos el arroz para evitar que una parte se quede pegada al fondo de la cacerola, es aconsejable ir removiendo periodicamente el arroz para evitar que se pegue al fondo.
Cuando vemos que en la superficie ya no hay agua quitamos la tapa y continuamos removiendo, vereis que el fondo de la cacerola aún queda agua. Dejamos la cacerola sin la tapa y removemos periódicamente para que la humedad se siga distribuyendo y evitar al mismo tiempo que se nos pegue.
Cuando ya no queda agua en el fondo de la cacerola, pero se nota que el arroz continua reteniendo humedad apagamos el fuego y retiramos la cacerola, le ponemos la tapa y la dejamos reposar hasta un rato.
Quitamos la tapa de la cacerola, hechamos un par de chorritos de aceite de oliva y mezclamos el arroz con la cuchara de madera, al principio dara la impresión que el arroz esta pegado formando un bloque, pero al ir removiendolo vereis que se separa y queda "al punto" de cocción.
Podeis ir experimentando, en mi caso, prefiero el arroz un poquito "al dente" (o sea un poco durito) pero si os gusta un poco mas hecho sólo teneis que agregar una pequeña porción de agua al principio, en nuestro caso hubieran sido 6 y medio o siete potes de agua para los 4 de arroz.
Bueno, espero que os salga bien.
Etiquetas: arroz blanco
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